Si eres de las personas que están considerando someterse a una cirugía de liposucción, debes tener claro que no todo es tan sencillo como ir a dormir y despertar con el cuerpo que siempre soñaste; más bien debes continuar cuidándote con dietas, el uso de faja (para reducir el edema y facilitar la retracción de la piel) y tratamientos kinesiológicos como el drenaje linfático.
Los profesionales de Kineplanet están capacitados para realizar este tipo de tratamiento, el que tiene múltiples beneficios como: acelerar los tiempos de recuperación, permitiendo que el paciente reduzca los dolores y malestares; estimula la reabsorción de edema y hematomas; evita la formación de fibrosis; se eliminan los restos de anestesia y suero utilizados en la intervención; se mejora el estado, la sensibilidad de la piel, además de ayudar a la recuperación de los tejidos y vasos linfáticos dañados durante la liposucción. Todo esto facilita el regreso a las actividades de la vida diaria del paciente.

¿Cómo funciona?
Algunos médicos recomiendan que las personas que tienen tendencia a retener líquidos o con insuficiencia venosa comiencen las sesiones dos semanas antes de la operación, no obstante lo más habitual es que se realice inmediatamente luego de esta.
Lo más recomendable es que sean 10 sesiones para una correcta retracción de la piel y para que ésta se amolde perfectamente al cuerpo.
Las técnicas que se utilizan deben ser muy precisas, porque un exceso de movilización podría empeorar el resultado haciendo la piel mucho más flácida. Además durante las primeras semanas no se realizan maniobras muy bruscas, debido a que puede causar daño, agravando los edemas y lesionando los vasos linfáticos.
A pesar de todo el movimiento que se va a realizar en las zonas afectadas durante la operación, no debes pensar que causará dolor, más bien sentirás mucho alivio desde la primera sesión, por lo que por ningún motivo debes temer y solo relajarte en las manos de nuestros profesionales.