La columna cervical se ubica en el segundo lugar después de la parte inferior de la espalda, se caracteriza por ser muy flexible y por tener mayor movilidad que cualquier otra zona de la columna vertebral. Es por esta razón que es muy frecuente sentir dolor.
El dolor cervical puede ser el resultado de anomalías en las partes blandas, músculos, ligamentos, discos y nervios; así como en las vértebras y sus articulaciones. La causa más común de dolor, son las lesiones de las partes blandas, provocadas por traumatismos o deterioro progresivo.

Síntomas
-El malestar puede comenzar con un dolor que irradia al brazo como una corriente, junto con la pérdida de fuerza de la extremidad.
– Dolor en la base del cráneo causando cefalea, además de una sensación de debilidad u hormigueo en los hombros y manos.
– Un dolor generalizado en los músculos del cuello, junto con una sensación de rigidez, dolor, tensión y se sienten duros al tacto.
– Postura anormal del cuello que causa que se desvíe hacia un lado.
– El dolor puede extenderse hacia los hombros o entre los omóplatos

¿Cómo se soluciona?
Para determinar que existe la enfermedad, el médico procederá a realizar exámenes moviendo las articulaciones del cuello, la columna, y las manos.
Posteriormente le recetará algunos analgésicos, junto con un tratamiento kinesiológico como los de Kineplanet, pues contamos con profesionales capacitados para el tratamiento de las patologías músculo-esqueléticas que afecten las articulaciones y ligamentos.
Para el tratamiento kinésico se trabaja con técnicas que incluyen: elongación del cuello para preservar la elasticidad de las articulaciones y el rango de movimiento con el objetivo de aliviar el dolor y la sensación de rigidez. Así como también, ejercicios para el fortalecimiento del cuello para ayudarlo a conseguir una mejor postura.