La prótesis de cadera o reemplazo total de cadera conocida en terminología medica como artroplastia de cadera, consiste en la sustitución total o parcial de la articulación, esta suele ser recomendada a pacientes con artrosis, o con cuadros de displasia de cadera, osteoporosis, enfermedades articulares inflamatorias, entre otras. En algunos casos, se les recomienda a personas con fractura de cadera. 

La mayoría de las veces la molestia y dolor de cadera se debe a un deterioro articular importante entre el fémur y la pelvis. Para el paciente con diagnóstico de artrosis de cadera -que padece rigidez dolorosa, daño de cartílago grave o fractura de cadera- la única solución es una prótesis total de cadera.

El objetivo de esta cirugía es recuperar la funcionalidad, conseguir que la persona sea nuevamente independiente en sus actividades de vida diaria, que se pueda mover libremente y sin dolor.

En Chile anualmente se realizan alrededor de 7.500 cirugías de prótesis de cadera. Esto se debe al aumento en la expectativa de vida y, con esto, la prevalencia de enfermedades osteoarticulares que provocan inflamación en la articulación, que incluyen patologías como artrosis, artritis y osteoporosis. 

Dolor al caminar

Los síntomas comienzan con molestias y dolor al caminar o al forzar la articulación, sin embargo, el malestar cesa luego de tomar reposo. Con el tiempo aumenta y logra limitar las actividades de la vida diaria, en movimiento o en descanso, ya que se intensifica y se vuelve progresivo. No es raro que el dolor se pueda sentir en la mitad del muslo o en la ingle.

Para poder realizar un diagnóstico del deterioro articular o fractura de cadera, La radiografía simple de pelvis y cadera suele ser suficiente para confirmar el diagnóstico de artroplastia de cadera, y no es necesario, en la mayoría de los casos, realizar otros exámenes más costosos.

Para ser candidato al reemplazo de cadera, la causa más frecuente de indicación de prótesis es la artrosis, que puede ser primaria o secundaria a cuadros como displasia de cadera, osteonecrosis, enfermedades articulares inflamatorias, entre otras. Sin embargo, también puede ser necesario colocar una prótesis en pacientes que presenten algunos tipos específicos de fractura de cadera.   

Tratamiento y cirugía de cadera

 En la primera fase se indican medicamentos analgésicos y antiinflamatorios para los episodios de crisis dolorosa, siempre bajo indicación y supervisión médica. Sin embargo, si ya se desarrolló la artrosis, la única solución es el reemplazo protésico de la articulación.
 
Debido a la gran cantidad de implantes de prótesis de cadera, depende de múltiples factores cuál será idóneo para el paciente. Es por esto, que el médico analiza las características del paciente como la edad, calidad ósea, presencia de alteraciones anatómicas o secuelas de enfermedades previas. En tanto, cuando el diagnóstico es para tratamiento de una fractura de cadera, no existe alternativa de un tratamiento no quirúrgico.
 
La prótesis total o artroplastia total de cadera -también conocida como cirugía de recambio articular- consiste en reemplazar la articulación dañada, por una articulación protésica que permita al paciente volver a realizar sus actividades de vida diaria, sin dolor ni molestia alguna.
 
En los últimos años se han logrado importantes avances: técnicas mínimamente invasivas, nuevos diseños de prótesis y nuevos pares de fricción. Esto permite que pacientes de menos edad puedan acceder a una prótesis o reemplazo articular, al mejorar los resultados y la sobrevida de éstas. Se han desarrollado nuevas prótesis de recubrimiento que sacrifican menos el hueso, que son más duraderas, de mayor resistencia y de menor desgaste, lo que es especialmente importante en los pacientes menores de 50 años. También están en desarrollo técnicas de navegación computacional para efectuar la implantación de las prótesis con mayor precisión.

Habitualmente la cirugía de prótesis total primaria de cadera está indicada a pacientes mayores de 60 años con artrosis, pero en la actualidad se presenta cada vez más en pacientes más jóvenes, donde se suman otras causas como la artritis reumatoidea, necrosis avascular, secuelas postraumáticas y pellizcamiento de cadera. En mujeres, la artrosis se presenta con mayor frecuencia que en los hombres, ya que ellas tienen mayor incidencia de displasia de cadera, lo que las hace más expuestas al desgaste de la articulación.

La prótesis total primaria de cadera, con una adecuada técnica quirúrgica, tiene un bajo riesgo de complicación global menor al 5%, así como una alta tasa de sobrevida en el largo plazo: sobre 90% a 10 años y sobre 80% a 20 años de seguimiento.    

Recuperación

En general, la rehabilitación de una prótesis total de cadera busca tratar de recuperar el movimiento de forma precoz. El paciente suele levantarse a caminar al día siguiente de la cirugía, con ayuda de dos bastones, un andador o burrito. La adecuada rehabilitación kinésica es fundamental durante las primeras semanas, logrando de forma progresiva el retiro de bastones, la recuperación de la fuerza muscular y la seguridad e independencia del paciente. Esto hace de la recuperación muy rápida, el post operatorio del paciente se desarrolla en casa, para volver a una actividad normal a los 20 a 30 días.

En Kineplanet contamos con especialistas en esta área que pueden ayudar y acompañarte en tu recuperación.