El Síndrome Metabólico se produce cuando una persona presenta un número de enfermedades caracterizadas por desórdenes metabólicos (donde el paciente no logra procesar una enzima u hormona específica, por ejemplo insulina, y las células de su cuerpo no pueden convertir el alimento en la energía que éste necesita). En su conjunto, producen más daño que si se presentaran de forma individual y su compromiso final es el aumento del riesgo cardiovascular y de Diabetes.

La Obesidad central, colesterol alto, presión arterial elevada, Hiperglicemia (exceso de glucosa en la sangre) y los niveles de triglicéridos (grasa) elevados en la sangre, componen el Síndrome Metabólico. Si una persona presenta tres de los factores de riesgo mencionados, se le puede diagnosticar el Síndrome. Y pese a que también inciden factores como la edad y antecedentes familiares, se ha establecido que la mala alimentación y la falta de ejercicio son sus principales causantes. Este Síndrome afecta a hombres y mujeres adultos de forma similar, así como también a niños y adolescentes. En Chile, su prevalencia es del 35,5% en la población.

Tratamiento del Síndrome Metabólico

-Cambiar el estilo de vida con el objetivo de disminuir el riesgo cardiovascular y no padecer de Diabetes.

-Modificar la dieta. Disminuyendo la ingesta de grasas saturadas o de origen animal junto con los azúcares. Y aumentar el consumo de frutas y verduras.

-Realizar ejercicio físico, con el objetivo de que el paciente baje de peso y reduzca su índice de masa corporal.

-También es posible utilizar fármacos para su tratamiento, pero ello dependerá de cada paciente y de qué patologías presente.